ORIGEN DEL MAL

Detalles de la misión

Nivel: 79

Ordenante de misión: Miembro de la Unidad Blanca Oliver

Utiliza el portal espacio-tiempo a la entrada del nido de Kameria y ve al escondite de Markabil. Tras haberlo vencido, recoge la séptima pieza de Memphis y vuelve a Oliver.

Recoge 1× Séptima pieza de Memphis
- ( Malvado Markabil )
Derrota Malvado Markabil × 1

Experiencia: 596391 EXP
0 115 662
Recibes los siguientes ítems:
- Guerrero
  - Hacha dragón defectuosa
  - Hacha de escamas de dragón defectuosa
- Corredor de la sombra
  - Biram-Harpe defectuosa
  - Garra de diamante defectuosa
- Arquero
  - Ballesta de los cazadores de dragones defectuosa
  - Ballesta de ligamentos de dragón defectuosa
- Mago, Sacerdote, Conjurador
  - Varita de sepira defectuosa
  - Varita de huesos de dragón defectuosa

Descripción

Oliver:

Gracias a ti pudimos hacernos con el último fragmento de alma. Pero aún queda mucho por hacer. Markabil está intentando evadir la censura de Parakelius. Por lo visto pretende poner nervioso a Kameria enviando los yetis y las harpías a su nido. Obviamente, Kameria nunca será capaz de controlar a los rahu, pero si lo despiertan estaremos en un lío bien gordo. ¡Tenemos que evitarlo, Jugador! ¡Encuentra el escondite de Markabil antes de que despierte a Kameria y acaba con él!

[Jugador]:

¡Yo le arrancaré el mal de cuajo a este canalla!

Oliver:

Jugador, sabes que eres el único capaz de viajar a través del espacio-tiempo. En cuanto estés en el escondite de Markabil, no habrá nadie que te ayude. Ten cuidado y que Leya esté contigo.

Oliver:

Si es cierto el rumor de que Ruard está cayendo en las garras del mal, podemos prepararnos para lo peor. Seguro que Parakelius no tarda en revelarse. ¡Estamos perdiendo demasiado tiempo! *suspira*

Oliver:

¿Qué dirá Parakelius cuando se entere de que hemos vencido a su mejor servidor y de que hemos conseguido las siete piezas de Memphis? Aunque todavía falta mucho para que podamos tener en nuestras manos la legendaria arma Emperador Divino, estamos preparados de sobra para que los rahu no nos supongan ningún problema.